Más de un millón de trabajadores vinculados al sector edificador, con proyecciones de llegar a 1,3 millones, y un promedio de 20 mil viviendas mensuales vendidas, son algunas de las metas trazadas por el ministro de Vivienda, Ciudad y Territorio, Jonathan Malagón, para el 2021.
Así lo reveló en días pasados, durante la rendición de cuentas del 2020 en la cual –además– señaló que el próximo año será el mejor de la historia para la vivienda, porque “tenemos una inminente necesidad de avanzar en soluciones habitacionales para la gente, y, claro, en acciones para el sector de agua potable y saneamiento básico”.
Malagón agregó que, respecto al 2020, el PIB de edificaciones superará el 15% anual, lo que aportaría al crecimiento del PIB de la economía nacional como un todo. Reiteró, además, que la gran apuesta con los 200 mil subsidios para vivienda de interés social (VIS) y de estrato medio (No VIS) se consolidará en el 2021.
“La pandemia exacerbó la demanda de vivienda, que, de hecho, se convirtió en el refugio de las familias. Por eso, la estrategia del Gobierno cuenta con una inversión de $11 billones, que no solo es ambiciosa en el monto, sino en la cantidad de unidades y en el tiempo en que se gestionarán: dos años”, anotó el jefe de la cartera de Vivienda, quien destacó que con corte a noviembre ya se habían vendido 156.173 viviendas nuevas, más de 111.000 de ellas sociales.
Esta dinámica es de gran importancia, si se tiene en cuenta que se dio en un entorno complicado por el COVID- 19. “Por eso, con grandes desafíos para contrarrestar la caída de las ventas y las iniciaciones, la reactivación de la productividad fue evidente, y en menos de dos meses recuperamos casi medio millón de empleos”, recordó el viceministro de Vivienda, Carlos Ruiz.
Ruiz destacó que el ritmo de ejecución de los subsidios para VIS creció más del 70%, al punto de que actualmente hay más de 35 mil gestionados. En el segmento No VIS –tras expedir un Confis, un Conpes y vigencias futuras– se pasó de 20 y 80 subsidios, a 500 y 800 por semana, y la meta en el 2021 es que sean 900 semanales.
Al tiempo que resaltó la expedición de 16 decretos en materia de vivienda, agua potable y saneamiento básico para enfrentar la pandemia, y la aprobación de la Ley de Vivienda y Hábitat –próxima a sanción presidencial, con un impulso importante a la vivienda rural–, el Ministro destacó las acciones del Viceministerio de Agua.
Según el viceministro Jorge Luis Acero, la fecha de entrega de subsidios rurales y comunitarios hasta el 30 de junio del 2021 es una gran noticia, así como el trabajo que se hace para atender la universalización de los servicios de acueducto y saneamiento, y las fuentes de abastecimiento, más allá de lo que trazan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
De hecho, algo para destacar es que, por primera vez en Colombia, 1,4 millones de personas se han beneficiado con los servicios de agua y saneamiento. “Además, aunque la cobertura es del 92% de la población, para dar el salto al 100% debemos cerrar brechas y llevar solucionar a los territorios más rezagados, a las áreas rurales y a los sectores informales”, dijo Acero.
Igualmente, destacó programas como Agua al Campo y Agua al Barrio, a los que se suman las Conexiones Intradomiciliarias, el programa SAVER y Guajira Azul. Sobre este último, Acero anotó que se consolidó como uno de los programas insignias del Gobierno con el cual, en dos años se han beneficiado más de 480 mil personas con 13 proyectos que contaron con inversiones que superaron los $86 mil millones.
Finalmente, y ad portas de terminar el 2020, vale destacar la implementa de los pliegos tipo en el sector de agua potable y saneamiento básico, que le apuestan a la transparencia y buscan garantizar que en los contratos del sector exista una amplia concurrencia de proponentes.